(Bloomberg) — El jefe del banco central de Perú, Julio Velarde, dijo que el producto interno bruto del país se contraerá este año, lo que marca la primera vez que un funcionario del gobierno reconoce públicamente el grado de la recesión económica.
El banco central dijo que el PIB se contraerá un 0,5% en 2023, en comparación con el pronóstico de septiembre de un crecimiento del 0,9%, una proyección prácticamente inalcanzable considerando que la economía se ha contraído durante seis meses consecutivos. Velarde redujo su estimación de inflación para 2023 del 3,8% al 3,1% debido a la flexibilización de los precios de los alimentos.
El año que viene, la economía crecerá un 3%, mientras que el crecimiento de los precios al consumo bajará al 2,3%, según las previsiones presentadas el viernes.
La economía de Perú está atravesando su peor recesión en años, coincidiendo con un período de alta inflación que finalmente parece haber quedado bajo control. Las autoridades han recortado su tasa de interés clave por cuatro reuniones consecutivas y los analistas ven más reducciones en el horizonte. El banco señaló las condiciones climáticas adversas para la agricultura causadas por El Niño, meses de lucha social y la débil inversión privada como contribuyentes clave a la caída del PIB de este año.
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“Los más importantes han sido los factores climáticos”, dijo Velarde. “Han afectado a lo que ha sido nuestro sector más dinámico en los últimos años, que han sido las exportaciones”.
El banco pronostica que el consumo privado aumentará un 0,2% este año, mientras que la inversión privada caerá un 7,3%.
Mientras tanto, la inflación general se reducirá hasta el rango objetivo del banco central de entre el 3% y el 1% durante los primeros meses de 2024. La inflación subyacente, que excluye los precios volátiles, lo hará este mes.